domingo, 26 de abril de 2015

Entre el cielo y la tierra, Carmina.

Vivimos entre cielo y tierra y así nos vamos. Nuestros pies en la tierra que somos y nuestra mente en el cielo, la dicha que siempre anhelamos. Venimos y nos vamos solos, pero hay gente, para mí privilegiada, que en vida supo vivir bien  la soledad que somos. No gente solitaria y huidiza, sino gente dichosa, precisamente porque se lleva bien consigo misma. Y ésta fue Carmina.

 Así pude sentirla en estos seis meses últimos en los que cayó enferma y ahora comprendo que ella fue un ejemplo para yo entender que vivimos entre  cielo y  tierra, porque desde el inicio ella supo enseñarme cómo llevaba su vida a solas con ella...y pude notar la paz y el confort que esto conlleva.

 Ayudada de todos, se mantuvo siempre consciente  a solas con ella misma. Ella era su vida y la dirigía entre cables de hospital, aparatos médicos, pruebas, resultados, gentes diversas y momentos muy duros, amargos.
En este tiempo  Carmina cuidó de Carmina, la respiración baja, la mano en el vientre atendiéndola, la amabilidad al recibirte, la prudencia en las palabras y esa contención ante todo lo que iba sucediendo. Nunca la vi llorar...más bien un gesto de impotencia a veces, un cansancio. Pero ahí estaba ella de nuevo, luchando, paso a paso, hasta el final. Resuelta.

La última tarde en la tierra, antes de subir al cielo, tarde de Resurrección, por cierto, aún me decía por señas cómo ayudarle a mover las piernas, estirarlas y encogerlas, y me pidió beber su leche y el cambio de postura. 
No dudo que eligió cuándo morir...lunes de Gloria,  porque como siempre   dijo "no tengo un pelo de tonta" Y es verdad.
Gracias Carmina.

4 comentarios:

  1. Querida Pandorilla:
    Tierna y desde el corazón tu conmemoración y tu recuerdo, profunda tu reflexión.
    Abrazos fuertes

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  2. Es verdad, venimos sólos y nos vamos sólos y mientras tanto, vivimos entre el cielo y la tierra. Somos una ínfima parte de energía en ese universo inmenso.
    Besitooosss

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  3. ¿Qué te puedo decir, Isabel? Que hay mucho amor, mucha ternura en tus palabras y eso es lo que cuenta. Un beso.

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  4. Certament una reflexió molt tendra i molt bonica. M'ha agradat poder-la llegir.

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