Durante años he paseado a primeras horas de la mañana por mi barrio, la Bonanova; subiendo por la Avenida del Tibidabo, la del famoso tranvía Azul, me adentraba en calles de una quietud encantadora...entre el trino de pájaros; mientras la luz del día se iba afirmando poco a poco, yo vislumbraba el fondo de jardines deliciosos, que rodeaban casas construídas con un encanto y una dedicación, que me resultaban especialmente entrañables.
Poco a poco mis pupilas fueron registrando aquella delicia y el resultado fue, quizá, los dibujos de mis casas con jardín. Ahora publico algunas fotos que lo atestiguan.
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ResponderEliminarEstas casas que tienen caracter propio también me entusisman
ResponderEliminarSerá porque albergan posibilidades que sin llegar a conocer son familiares
Será porque sobrevive en ellas lo que no se va después de irse sus moradores en forma de huella imperecedera
Porque sus plantas leñosas robustecidas con el paso del tiempo completan y agrandan su ciclo de existencia
Un tesoro visto en perspectiva
El resguardo del alma del lugar
Para pasear al estilo de siempre