La belleza se Pandora palidece ante la presencia sesgadora de la muerte, pues constata la incapacidad humana para convivir con ella; el silencio es la respuesta ante el dolor de quien pierde a un ser querido, no se sabe qué decir y quizá aún menos qué hacer ante la pena del otro, y callamos. ...o hablamos de otras cosas.
Quien pierde a un ser querido se sabe acompañado, no va solo, están ahí los otros, aunque no se preste una conversación abierta, directa, amable y generosa...que haga que el dolor se exprese, salga, corra, se comparta...y te sane...aunque sólo sea momentáneamente.
Nos falta cultura de la muerte, quizá porque nadie se siente libre de penas, airoso como para poder consolar y además esta sociedad te bombardea con la necesidad de distraerte, de no aburrite. ...de dispersar.
Pandora está esperando la explosión del color de esta nueva Primavera...que entre lluvias y vientos se acerca...la Naturaleza fue siempre su más fiel compañera, su silencio está lleno de amores y bellezas, ella escucha y consuela, se sienta junto a ti y tú al lado de ella, no hay prisas ni cosas a hacer, estamos las dos juntas, muy adentro, donde anida la pena.
Estáis todos ahí, donde la Madre Tierra.
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Hay golpes en la vida tan fuertes...
ResponderEliminarabren zanjas oscuras en el alma más fuerte
son los heraldos negros de la muerte. Esperabas de tus amigos unas palabras breves
quizás este poema suplirá tu pena.
Ella estará siempre contigo
en el amanecer, en el atardecer
en la brisa del mar,en el perfume de las flores
y en el rocío que las cubre al alba.
Será tu ángel, tu guía, tu abrigo
será tu luz,tu vida y tu caolor en el frío
la luz que ilumina tu pelo al viento
la estrella que brilla en la noche.
Todos los días, en todos los momentos
estará allí contigo SIEMPRE
Pandora, me ha quedado mal. "Esperabas de tus amigos....."va debajo entre el el 3º y 4º verso. Si puedes, arréglalo, que queda fatal, así.
ResponderEliminarBesitos
Hilda, cuánto corazón en tu poema, te has pasado...muchísimas gracias, me has emocionado, no sólo por la belleza de forma y contenido, sino por tu respuesta tan generosa, abierta y amorosa, por tu comprensión y tu consuelo.
ResponderEliminarHay mucho Dios contigo.
Escribe, Hilda, sé lo que digo, escribe más y más, será un bálsamo para los demás.
¡Gracias amiga y camarada rubilla del Rincón!, me has alegrado el día.
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Me lo copio a mano y con tu permiso cambio el orden del final, que sería "Siempre contigo"
Encontrar la belleza en el silencio y el dolor es sin duda encontrar el sentido, el aliento, el sendero luminoso que nos conduce silencioso hacia el encuentro con la Vida y su oscura hermana, la muerte. Los que nos dejan siguen latiendo en nuestro corazón, la presencia de su ausencia nos hiere en el alma. Y seguimos, intentando comprender, sin palabras, agradeciendo el regalo que fue dado, y que hoy hemos perdido. Un día, ya hace mucho tiempo, lo invisible se vistió de apariencia y creó el mundo. Y al devolvernos a la invisibilidad, se regocija, en silencio, ante la primavera que vendrá...
ResponderEliminarUn abrazo